Punta Paloma 0 - 2 El Organillo
Era una tarde tonta y caliente...
El equipo del Punta Paloma realizó una buena preparación del choque, a pesar de las bajas y los hombres tocados a consecuencia del viernes anterior, la moral estaba alta.
Mientras los jugadores estaban despreocupados en el terreno de juego calentando, en el banquillo se libraba la primera batalla que para muchos pasó desapercibida. Tras intensas negociaciones, el punta paloma tuvo que renunciar al banco-banquillo en favor de Mohamed y sus amigos (la historia del Alakrana ha hecho mucho daño, más del que nos pensamos). No obstante, antes de que comenzara la segunda parte, las negociaciones retomaron y el banquillo se recuperó: Mohamed y sus amigos estaban cansados y se querían ir a casa. Quizás no fue tan importante, pero ahora echo la vista atrás y quizás este hecho significaba algo...
El partido comenzó y el Punta Paloma salió entregado ante un equipo que movía muy bien la pelota. El desgaste físico fue notorio pero los jugadores hicieron un gran esfuerzo. El partido fue muy trabajado y buscando siempre el ataque pero se notaba precipitación, descolocación lo que hacía que en defensa se sufriera más que en anteriores encuentros. En algunos momentos del partido el Punta era más corazón que cabeza. Este podría ser el titular del partido de no haber sido por el "gordo vasilón" al que llegaremos más adelante...
Como viene siendo habitual los jugadores del Punta Paloma tuvieron grandes y numerosas ocasiones llegando a contabilizar 4 palos si mis datos son correctos y nos los confundo con la jornada anterior. Sin embargo, el primer gol del encuentro llegó a manos del equipo que menos lo merecía. Una jugada aislada, un control sin peligro, un disparo lejano y... gol 1-0. Nuestro pseudo-portero Claudio, que realizó una gran actuación en todo el encuentro, no pudo hacer nada ante semejante pepino que se sacó de la manga el "gordo vasilón" dejándo constancia de que los gordos también la saben meter.
Varapalo para el Punta que no lo merecía. A pesar de ello siguió con su empuje pero poco a poco el Organillo empezó a controlar el partido.
Así se llegó a la segunda parte.
En la segunda parte el planteamiento fue el mismo, el Punta estaba metido en el partido, creando ocasiones hasta que el tiempo se iba agotando. En ese momento llegó la mejor jugada del partido. Ya había quedado de manifiesto en anteriores jugadas que al "gordo vasilón" le gustaba sentir a alguien por detrás, era bueno jugando de espaldas a la portería y cubriendo el balón. Llevaba incordiando a la defensa blanqui-azúl todo el partido pero Gregorio y el resto de la defensa siempre le habían repelido. Sin embargo, eso no podía seguir así. En un pase al centro donde el "gordo vasilón" creía que iba a llegar sin problemas a controlar el esférico ante el marcaje férreo de Javi, que estaba cansado de estar por detrás, la pelota se elevó. Y Javi, pensando que semejante individuo no podría levantar la pierna por encima de su tobillo, contactó con el balón en el aire haciéndole un sobrero de libro. No perdiendo la esperanza, intentó recuperar la posición recordando el cuento de la liebre y la tortuga. Pero el "gordo vasilón" que podría parecer la tortuga por la forma redonda que tenía, no se lo pensó dos veces y sin dejar que la pelota alcanzara el suelo, pegó otro pepino que fusiló al guardameta, que no pudo hacer nada, e hizo que las ilusiones del Punta se desvaneciera y a la vez que creciera un odio de Javi hacia esa persona.
El resto de la segunda parte, con el equipo volcado en el ataque se produjeron ocasiones para el Organillo que no supo aprovechar. Igualmente, el Punta tuvo varias oportunidades para volver a meterse en el partido pero no llegó el esperado tanto.
Final del partido. Segunda derrota del Punta Paloma, coincidiendo con la incorporación del nuevo fichaje. El entrenador ha de reflexionar al respecto.
No hubo incidentes, salvo pequeños piques discretos con el gordo vasilón a consecuencia de la impotencia y de su "juego de espaldas". Un partido bastante limpio. Se echó de menos a Juanfran en este aspecto.
El arbitro desapercibido, como es de esperar en este tipo de encuentros.
Lo positivo: El equipo corrió, lucho y sudo.
Lo negativo: Descolocación, precipitación y falta de puntería.
El bueno: El gordo vasilón
El feo: El gordo vasilón
El malo: El hijo puta del gordo vasilón
Nota del administrador: Esta crónica se ha reproducido "As is" y representa la opinión subjetiva del jugador puntapalomero. Si el delantero referido lee esta crónica, diríjase a siemprefuipuntapalomero@puntapaloma.fs para negociar los términos de su fichaje.
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